Es hora de abandonar el método tradicional de trabajo. Necesitas establecer un Plan de Estrategia, para alcanzar tus objetivos.

   Ya no es válido, el decidir hacer un producto o dar un servicio, después, buscas a que empresas puedes venderles, les visitas o llamas por teléfono, y en caso de que te compren, pues todo en marcha.

Produces, entregas, y a esperar que el círculo funcione. Cuando el cliente necesite algo más, te llamará, y de nuevo la rueda a funcionar.

   Pero no, sabes que eso no es lo correcto, ahora. El mercado actual es más complejo, hay más competencia, y ahora son las empresas las que tienen que buscar al cliente. Y el cliente a su vez, actúa de otra forma. Estas obligado a adaptarte.

   Es por ello que la actividad de la empresa, no puede fijarse a  la confianza de que te llamarán, de que vendrán a buscarte, porque tu producto es lo mejor.

 Sin ningún plan, y como dicen por ahí, “como pollo sin cabeza”.

   La Empresa, PYME o Autónomo, en la actualidad necesita de un PLAN DE ESTRATEGIA, que deberá comprender los siguientes puntos:

• ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN
• ANÁLISIS DAFO
• ESTABLECER EL PÚBLICO OBJETIVO
• MARCAR OBJETIVOS

ANÁLISIS DE LA EMPRESA

Si, un análisis propio. Ya sé que te conoces, pero debes decirte la verdad. Estas en la obligación de hacer un análisis objetivo, para tener un buen punto de partida.

Por ello, papel y lápiz, abre un Word en el ordenador, o como lo prefieras, y comienza a anotar….

• Fecha de Inicio de tu actividad.
• Que produces o que servicio prestas.
• Capacidad de trabajo.  Establece tu horario actual, y posibilidades que existirían, en caso de necesidad de ampliación o reducción, para que puedas ver tu margen de mejora.
• Anota tu “bagaje” hasta la actualidad. Que trabajos has realizado hasta ahora, a que se ha dedicado tu empresa?  Que acciones has desarrollado hasta el momento actual?
• Haz un balance de como estabas al inicio, y como te encuentras en este momento, cual ha sido tu “transformación” y lo que has conseguido.

Definido quienes somos, y donde nos encontramos, toca el turno de:

ANÁLISIS WEB

Damos por hecho que tienes página web, porque, si no es así, este es uno de los primeros pasos. ¿Por qué?

Aquí es donde mostrarás tu producto o servicio, este será tu “hogar” en Internet.

Una página web, te permitirá tener la empresa abierta 24 horas al día, 365 días a la semana.

Tendrás que vigilar que cumpla los siguientes requisitos:

• Usabilidad.  Fácil de navegar y de carga rápida.  No debes de perder al público en complicados menús, que acaben por despistar, y los usuarios no les quede claro que es lo que haces.
• Visibilidad. Tiene que estar adaptada a todos los dispositivos, PC, Tablet y móvil. Aunque debes centrarte principalmente en móvil, ya que hoy es el dispositivo más utilizado para navegar.
• Cuida la imagen. Imágenes y videos de calidad, menús en los formatos tradicionales, y una letra sencilla y llamativa.
• Chatbots. Imprescindibles hoy. No puedes olvidar incluir un chat para interactuar de forma instantánea con tus visitantes. Whatsapp, u otros muchos, serán fáciles de usar.

ANÁLISIS DE LA COMPETENCIA

   No, no le vas a copiar ( o sí, ya veremos), pero debes saber a quién te enfrentas, y que es lo que ellos están haciendo.

   Diferencia los 2 tipos de competencia, la “real” y la “deseada”.  La deseada, son aquellas empresas a las que te gustaría parecerte, la meta que quisiéras alcanzar. Está bien tener unas aspiraciones, pero para el análisis, y para establecer tu plan, centraté en la COMPETENCIA REAL, ni por encima, ni por debajo.

Debes de comprobar:

• Donde vende.
• Como vende.
• Que campañas online u offline, está haciendo.

¿Cómo puedes saberlo? Observa sus Redes Sociales, y comprueba que publican, como interactúan con sus clientes, etc…

Facebook, y aplicaciones como Metricool y Socialgest, te permiten hacer un seguimiento, y puedes observar cómo es su actividad en Redes Sociales.

Para un análisis de su web, y comportamiento en Internet, puedes usar  Google Trend  y Similarweb.

ANÁLISIS   DAFO 

   En el siguiente apartado de preparación de tu Plan Estratégico, debes realizar el análisis objetivo DAFO.

   Este análisis, consiste en determinar los factores internos y externos que influyen en tu empresa, en tu actividad.

Una vez delimitados, nos será más fácil dirigir nuestras acciones.

D (Debilidades): Son aquellos factores internos, que te ponen en desventaja con tu competencia.

• Llevar menos tiempo en el mercado.
• Menor capacidad de producción o de ofrecimiento del servicio.
• Menos herramientas.

A (Amenazas): Son factores externos, que se escapan a tus  posibilidades, pero que influirán en tu actividad.

• Situación económica.
• Cambios por parte de la competencia.

F (Fortalezas): Se refiere a los factores internos, que debes explotar, pues son la ventaja que tieness frente a tus competidores en el mercado.

• Atención más personal del cliente.
• Al ser más pequeños, mayor cuidado del producto o servicio.
• Mayor control de las acciones realizadas, con una menor inversión, en agentes externos.

O (Oportunidades): Son los factores externos, que en determinados momentos pueden presentarse, y que debes aprovechar.

• Mala gestión de la competencia.
• Falta de estrategia de otras empresas del sector.
• Aprovechar nuestra innovación.

PÚBLICO OBJETIVO

   Existe la creencia de que, podemos venderle a todo el mundo. O de que nuestro producto es para todos. Y no, eso no es cierto.

  Tienes un producto o servicio, dirigido a un público concreto. Por ello, tu obligación es determinar qué persona, o personas, son las adecuadas para lo que ofreces.

Determinar este tipo de público, te beneficiará enormemente:

• Podrás determinar cómo dirigir tus estrategias.
• Saber cuales son las necesidades reales de estas personas.
• Ahorras tiempo y dinero, pues evitarás dirigir tus acciones, a aquellas personas que, hagas lo que has, no te comprarán o contratarán.

   Esto es lo que en marketing denominamos, Buyer Persona. Hablamos del cliente “tipo” que está más predispuesto a adquirir nuestro producto o servicio.

   Para saberlo, debes de hacerte algunas preguntas que, aunque puedan parecer “sin sentido”, cuanto mayores respuestas tengas, más fácil será tu camino a él.

Piensa en:

• Su sexo y edad. (Si fabricas ropa de pre-mama, está claro que te dirigirás a mujeres, pero no a una franja superior a 45 años, ¿verdad?)
• Su estado civil. (Si quieres vender anillos de compromiso, probablemente te dirigirás a hombres o mujeres casados, ¿no?)
• Nivel de estudios.(Imagina que ofreces una formación, con unos niveles determinados en matemáticas…., probablemente tendrás que pensar en ofrecerlo a unas personas con un determinado nivel de estudios.)
• Nivel económico.(Si vendes un viaje a un determinador lugar, por un precio medio- alto; determinará que las personas que puedan comprarlo, tienen un nivel económico concreto)
• Que necesidades tienen. (Si te dedicas a formación online para emprendedores, no debes gastar dinero en ofrecer producto a un funcionario público. Que podría demandarlo, pero no es lo habitual….)
• En que Redes Sociales se mueve. (Las Redes Sociales tienen patrones de público genéricos, pero bien analizadas, encontramos que, en cada una de ellas, hay un público particular.)
• Que tipos de contenido les gusta. (No debes ofrecer el mismo contenido, si lo que vendes es Vino, o un videojuego)

Recuerda, a mayor cantidad de datos, mayor facilidad para llegar a él.

OBJETIVOS

Una vez que tenemos analizado la situación actual de nuestro negocio, y nuestro cliente “tipo”, llega el momento de establecer, cuales van a ser los objetivos.

Para ello, debes utilizar una sencilla técnica, que son “objetivos SMART”:

• eSpecíficos. Deben de ser concretos, imagina que quieres vender “X” cantidad en una determinada zona.
• Medibles. Que puedan ser analizados en el tiempo, si se cumplen o no.
• Alcanzables. No debes poner unos objetivos “no reales”, que lo único que conseguirán es desmoralizarte.
• Relevantes. Debe ir en línea con tu actividad.
• Temporales. Tienes que acotarlo en el tiempo.

   Una vez establecidos, y llegado al tiempo marcado, analizaremos lo que hemos conseguido, lo que teníamos previsto, y tomaremos decisiones de cambios, incrementos de inversión, mejoras, etc., que estimemos necesarias.

   Ten en cuenta que, si antes no hemos establecido objetivos, nunca podremos saber si nuestro proyecto es lo que queremos o no.

Y tu, tienes establecido un plan estratégico.